El domingo 12 de mayo entraba en vigor la norma sobre el registro diario de la jornada que dos meses antes había publicado el Gobierno y a la que se le había prestado una atención muy relativa hasta que se nos ha venido encima. Quizá esperábamos que no se convalidase el Real decreto en el Parlamento o que se hubiera tramitado como proyecto de ley con las enmiendas que aclarasen las lagunas que deja su exigua redacción.
El viernes 10 se celebró en CONFEVICEX una interesante jornada sobre la jornada en la que Pere Anrubia, el presidente de la Comisión de Asuntos Sociales, aclaró las dudas de los asistentes sobre este asunto. Naturalmente aclaró las que pudo aclarar porque siguen habiendo sombras e inquietud sobre las relaciones laborales en las que el tiempo es un factor secundario siendo lo primordial el resultado o en las que la jornada es anárquica -altos cargos, comerciales, transportistas-.
El Ministerio ha editado una Guía Práctica para aclarar las dudas. Preferiríamos un reglamento que las aclare de verdad y que lo haga con valor normativo.