Las descomunales lluvias, la consiguiente riada y los tornados del pasado 29 de octubre, además de arrastrar la vida de más de 220 personas, han dañado gravemente cristalerías, almacenes y transformadoras de vidrio y fábricas de cerámica, según se nos informa desde la Federación Valenciana de Cerámica y Vidrio. Algunas se cuentan entre las líderes de España.
Aunque el Gobierno ha movilizado ya más de 14.000 millones de euros (aproximadamente el 1% del PIB), no todo es desembolso de dinero público ”,… puesto que 5.060 millones se canalizan a través de los créditos ICO (60 millones están destinados a los agricultores) y 3.500 millones los pone el fondo de compensación de las aseguradoras. El resto de las medidas tiene una naturaleza muy dispar, desde moratorias y rebajas fiscales para empresarios y familias (incluida la de hipotecas en este último caso), hasta subvenciones al campo y a los daños por vivienda” según ha matizado CEOE en su Panorama Económico de Noviembre.
En el mismo informe, CEOE expresa las dificultades para cuantificar todavía los efectos económicos de la DANA: “…, tras la destrucción de tejido productivo, infraestructuras, viviendas, automóviles y tierras de cultivo. Hay que tener en cuenta que esta provincia aporta alrededor del 5,5% al PIB español y su economía emplea a 1.219.000 ocupados según la EPA, de los cuales 916.000 trabajan en el sector servicios. Los municipios afectados son alrededor de 72 de los 266 que tiene la provincia.”
La Generalitat Valenciana ha lanzado una “primera petición” de 31.400 millones de euros, cifra provisional para la restauración de las zonas devastadas, que supone algo más del 2% del PIB de España en 2023. Sea o no una cifra bien estimada, la realidad es que la repercusión del cataclismo va mucho más allá de las personas y de los territorios directamente afectados.
De momento, la valoración de la Confederación de Empresarios de la Comunitat Valenciana (CEV)sobre las medidas inmediatas ha sido positiva , en tanto que recoge gran parte de las solicitadas con carácter de urgencia pero considera que se pueden mejorar algunos aspectos concretos referidos a las condiciones de los ERTE-DANA, a los beneficios fiscales del IBI e IAE y a los beneficios fiscales, según indica la CEOE en el informe antes citado.
Sin embargo, la desconfianza por el ridículo auxilio prestado por las administraciones públicas en los tres días inmediatos a la riada y la vergonzosa reacción de los principales líderes políticos centrados antes en el reproche que en remediar las urgencias, se ha trasladado a redes y a foros ciudadanos y empresariales.
Así es que, pese a la opinión positiva de CEV, la invocación a la resiliencia y las ayudas procedentes de entidades particulares como Mercadona a través de su iniciativa “Alcem-se” o las subvenciones de 50.000 euros a sus empleados, en los ánimos pesan más la indignación y la desconfianza que el optimismo.